Ascensos e ‘invitaciones’ al retiro en la PNP son irregulares : Expreso

Documentos advierten proceso irregular en selección de 790 oficiales de la PNP

Ascensos e ‘invitaciones’ al retiro en la PNP son irregulares

•  Domingo 11 de diciembre del 2016

El coronel PNP Juan Asmat Bucalo, quien aparece en la lista de cinco coroneles, cinco comandantes, dos mayores y 17 suboficiales que laboraban en unidades especializadas PNP sospechosos de haber direccionado investigaciones para librar de graves denuncias a Rodolfo Orellana Rengifo y a miembros de la organización criminal que este encabezaba, también ha sido premiado con su permanencia en la PNP.

Personal separado de la institución critica que en la Policía se hayan quedado agentes cuestionados y con antecedentes.

Cuando el ministro del Interior, Carlos Basombrío, anunció junto con el director general de la Policía Nacional del Perú (PNP), general Vicente Romero, que se invitaba al retiro a 790 oficiales de los grados de coronel, comandante, mayor y capitán, aproximadamente la mitad de los “invitados” –es decir, más de 300– no entendían por qué se les cortaba de manera abrupta su carrera policial.

Es cuando las preguntas aparecían de inmediato: ¿qué criterios técnicos y objetivos se utilizaron para seleccionar esta cantidad de oficiales de armas y de servicios? ¿Se invitó al retiro al personal cuestionado en presuntos delitos de gran corrupción dentro de la institución? ¿Fue esta selección un acto riguroso y necesario dentro de la PNP o fue más el producto del amiguismo o nombramiento a dedo de parte del órgano selector?

De esas y otras interrogantes sale este informe. En aras de la transparencia informativa intentamos comunicarnos con el área de prensa de la PNP para hablar con el director de la PNP sobre estos cuestionamientos, pero hasta el cierre de esta edición no respondieron. Queríamos saber no solo del proceso de invitación al retiro sino también del proceso de ascensos.

Fuentes confiables señalaron a EXPRESO que el personal afectado pide al Congreso, específicamente a la titular de la Comisión de Defensa y Orden Interno, Luciana León, y a sus miembros, que investiguen estos pases al retiro porque se habrían cometido ilícitos como abuso de autoridad, falsedad genérica y asociación ilícita para delinquir.

ERICK SANCHEZ

SIGO SIENDO

Si bien es cierto que el pase al retiro de 790 oficiales generó malestar en la familia policial, cuyos miembros consideraban que no se seleccionó de manera objetiva sino a dedo, lo que también se cuestiona es que en este segundo proceso de “limpiar” a la PNP se pasó por alto considerar a oficiales con serios cuestionamientos o investigados.

Es el caso del oficial César Arredondo Ramos, quien se mantiene en la institución tras ser ascendido por “acción distinguida” en la modalidad “acción de armas” en los hechos ocurridos el 5 de junio de 2009 en el caso denominado ‘Baguazo’. El conflicto dejó 33 personas (23 policías y 10 civiles) fallecidas y un agente desaparecido (mayor PNP Felipe Bazán).

También sigue en la PNP Juan Fernández Guevara, otro ascendido por el infeliz operativo de Bagua y relacionado además con el caso del irregular resguardo policial a Óscar López Meneses, lo que le valió que la fiscal anticorrupción Nora Córdova lo acusara a él y a 11 policías de alto rango por peculado de uso. Entre ellos a  Walter Bailón Farfán y al comandante Freddy Delgado de la Torre.

El coronel PNP Juan Asmat Bucalo, quien aparece en la lista de cinco coroneles, cinco comandantes, dos mayores y 17 suboficiales que laboraban en unidades especializadas PNP sospechosos de haber direccionado investigaciones para librar de graves denuncias a Rodolfo Orellana Rengifo y a miembros de la organización criminal que este encabezaba, también ha sido premiado con su permanencia en la PNP.

Otro beneficiado es el comandante Marco Antonio García Gómez, jefe del Departamento de Operaciones Tácticas Antidrogas de Tarapoto (San Martín), quien fue sindicado como cabecilla de una presunta red mafiosa integrada por un alto oficial y ocho subalternos de dicha institución, acusados de robar cargamentos de cocaína a narcotraficantes para revenderlos a terceros.

También permanece en la institución el comandante Raúl Prado Ravines, acusado de liderar un supuesto ‘escuadrón de la muerte’ que tanta convulsión creó, pues se estimaba que este habría conformado un grupo de policías que ejecutaron extrajudicialmente a delincuentes para obtener beneficios profesionales y económicos.

Estos y otros oficiales no fueron invitados al retiro hasta hoy a pesar de que tienen cuestionamientos pendientes. Hemos recibido una cantidad mayor de casos menos mediáticos, pero que muestran este tipo de ausencias que más adelante ampliaremos en otra edición.

¿PROCESO “TRUCHO”?

Según los documentos a los que tuvo acceso EXPRESO tal situación de rigurosidad y respeto al debido proceso no habría ocurrido. Y no se dio porque, según las mismas fuentes y los casos ya tratados en la edición de EXPRESO del domingo 4 de diciembre, era materialmente imposible revisar la documentación de cada oficial y a su vez fundamentar por qué razón se apartaba a los efectivos de la PNP.

Lo más grave aún sería que quienes integraron el Consejo de Calificación, que emitía actas individuales de los 790 efectivos policiales invitados al retiro entre las fechas del 15 al 18 de noviembre, hacían otras actas del Consejo de la Orden al Mérito de la PNP para estimar o desestimar la condecoración al orden al mérito por acción distinguida a generales en la PNP.

Cabe precisar que ambos consejos tienen funciones distintas pero son integradas por los mismos generales y que resulta difícil de creer que hagan dos trabajos al mismo tiempo en distintos lugares tal como lo especifican los documentos a los que tuvimos acceso y que presentamos para mayor veracidad.

TODO EMPEZÓ…

Tal como escribimos en el informe “Terremoto en la PNP” en este diario (14/10/2016), el jefe del Gabinete de Asesores de la Alta Dirección del Ministerio Interior, Leonardo Caparrós Gamarra, solicitó al general PNP Luis Martín Mogrovejo Castillo un listado con información que registre características específicas.

Es decir, un listado del personal policial que registre insuficiencia académica, disciplinaria, sanciones por faltas graves o muy graves desde la entrada de vigencia del Decreto Legislativo Nº 1150, así como aquellos oficiales que estén sujetos a un descuento judicial por pensión alimenticia, sin haber ascendido o llevado cursos, entre otras faltas.

Esto según los entendidos sin que le corresponda porque solo puede solicitarlo el director general de la PNP y no un asesor ministerial. Sin embargo, para la familia policial sin antecedentes negativos en su carrera esto no representaría ningún temor, mientras estos no perjudiquen a unos para favorecer a terceros.

MÁS DEL PROCESO

Ahora, a modo de ejemplo presentamos cinco casos concretos que evidenciarían irregularidades en el proceso de invitación al retiro de ese universo de 790 oficiales. Se tratan tanto de las actas de evaluación individual de cada efectivo como de las resoluciones ministeriales que se les emite formalizando pasar a retiro por causal de renovación de cuadros de manera excepcional.

Según las actas de evaluación individual correspondientes al mayor de armas Carlos Enrique Arteta Aucaruri, el comandante Richard Gonzales Begazo, el comandante Andrés Lorenzo Mariluz Mendoza, el comandante José Fernando Ramírez Oña y el mayor Luis Guillermo Quintana Murillo, se decide al final proponer sus pases a la condición de retiro.

Es así que se emiten en ese mismo orden de los antes referidos las resoluciones ministeriales que formalizan. Es decir, resuelven luego de ver el acta de evaluación anterior pasarlos a retiro. Estas se concretizan entonces con las resoluciones  Nº 1098-2016-IN, Nº 1229-2016-IN, Nº 1420-2016-IN, Nº 1386-2016-IN y Nº 0972 -2016-IN, respectivamente.

Resulta entonces que en el caso de las actas de evaluación individual de los efectivos arriba mencionados, no especifican las razones por las cuales se les invita al retiro. Es cierto que el ministro Basombrío explicó en algún momento que no necesariamente saldrían los malos efectivos aunque era preferible que así ocurra.

Lo curioso de este asunto incluso radica en que en el caso de Arteta Aucaruri se le invita al retiro “para realizar un racional reajuste del número actual de Coroneles de Armas, de conformidad a lo establecido en el Cuadro de Organización de la PNP y Cuadro de personal de Oficiales de Armas, aprobado mediante Resoluciones Directorales Nº 1180 y 1181-2016-DIRGEN/EMG-PNP para hacer más eficiente y eficaz el accionar policial”, tal como reza parte del acta de evaluación individual.

En pocas palabras se le invita al retiro para un reajuste de “coroneles de armas” cuando él tiene el grado de mayor de armas. Ocurre la misma figura con Richard Gonzales que es comandante de armas y se le invita al retiro para un reajuste de coroneles. Igual sucede con el comandante de armas Andrés Mariluz, con José Ramírez y Luis Quintana.

¿DON DE UBICUIDAD?

Resulta más que curioso que los integrantes del Consejo de Calificación que vio el pase al retiro de estos 790 oficiales puedan realizar este proceso en el distrito del Rímac y otro trabajo ya como miembros del Consejo al Mérito de la PNP en San Isidro. Todo el paquete con una diferencia en tiempo de tan solo 14 minutos.

O es una de dos. O pudieron trasladarse de San Isidro al Rímac, exactamente ir desde la Av. Canaval y Moreyra, cuadra 6, para abordar su trabajo como integrantes del Consejo al Mérito de la PNP el día 16 de noviembre del 2016 a las 23: 25 horas, o en un tiempo récord llegaron al Rímac ese mismo día a las 23: 39 horas en el Complejo Policial Juan Benites Luna en el Jr Los Cibeles 191.

Otro día donde se muestra este raro don de ubicuidad o un extraordinario paso, trasladándose del Rimac a San Isidro en apenas 13 minutos de diferencia el día 18 de noviembre de 2016. Esto, tal como consta en el primer caso en el Acta Nº77-2016-COM/PNP del Consejo de la Orden al Mérito y en el acta de evaluación individual del Comandante Richard Jonathan Gonzales Begazo.

En el segundo caso, en el Acta Nº163-2016-COM/PNP del Consejo de la Orden al Mérito y en el acta de evaluación individual del mayor de armas PNP Roberto Cesar Santa Cruz Minaya. Y es que una es la dirección de la Sala de Comando de la Dirección General de la PNP ubicada en San Isidro y la otra la Sala de Trabajo de la Dirección Nacional de Gestión Institucional de la PNP.

Como se decía ambos consejos son integrados por los mismos altos mandos de la PNP. Ellos son el presidente, general PNP Vicente Romero Fernández, director general de la PNP que actúa en representación del ministro Basombrío.

Asimismo, los generales PNP Edison Pastor Salas Zuñiga, Richard Douglas Zubiate Talledo, José Luis Lavalle Santa Cruz, Pedro Antonio Hoyos Arévalo, César Augusto Gentille Vargas, Nicolás Rafael Cayo Noriega, Máximo Fidel Sánchez Padilla, Luis Genaro Saldaña Bardales y el secretario permanente de la Orden al Mérito de la PNP, Luis Martín Mogrovejo Castillo.