Por Constancia Leshin y Angie DeLozier, con Manuel Mazzi Casas
El personaje más histórico entre los criadores de Cieneguilla indudablemente es Clemente “Chito” Palma, bisnieto de Ricardo Palma a quien muchos consideran como el más grande autor peruano de todos los tiempos. El Sr. Palma es propietario de Radio Miraflores, una de las estaciones de música popular más conocidas dentro del ámbito limeño. En el ultimo Concurso Nacional en Lima, en octubre 1978, su capón Chacal fue Campeón de Campeones. Negra Linda, Barby, Chito Mamacona y su madre, Chito Chinela, son todas yeguas de la crianza del Sr. Palma que han sido exportadas a los Estados Unidos.
El más grande de los criadores de Cieneguilla, conocido también por muchos en los Estados Unidos, es José Miguel Morales. Este, que vale la pena notar, obtuvo su doctorado en la Universidad de Stanford. Con su socio, Pedro Gastañeta, formó el Criadero La Maestranza. El Criadero La Maestranza es muy hermoso y los caballos del Sr. Morales pastan en pequeños campos de alfalfa, cada uno cercado por grandes eucaliptos que propician un ambiente fresco y tranquilo. El ha mantenido viva la ahora escasa sangre de Señorón, el famoso semental de Pedro Cabrera que fuera Campeón Nacional de Campeones Peruanos en 1956 y 1958, a través de su semental mayor Pensamiento, hijo de Señorón. Dos renombrados hijos de Pensamiento que se encuentran en los Estados Unidos son *Señor de Lima y *Quinto de Plata. Dos yeguas criadas por el Sr. Gastañeta también en la actualidad aquí son *Alison y *Lluvia de Estrellas.
Un aspecto interesante de los programas de crianza tanto del Sr. Morales como del Sr. Mazzi, es que cuando ellos al percatarse que la tendencia en el resto del Perú era la de incorporar la sangre de Sol de Oro (V) en todas las demás líneas de sangre, decidieron mantener sus propias líneas de sangre libres de sangre de Sol de Oro (V) para cuando fuese necesario cruzar las líneas de sangre de Sol de oro con otras líneas, las líneas de sangre de ellos estarían puras, pudiendo así ser utilizarlas. Esto no significó que no admirasen ni respetasen a Sol de Oro (v), como el Sr. Mazzi, en su articulo sobre el Concurso Nacional en la edición verano 1978 de Peruvian Horse World, lo llamó “aquel extraordinario estrella de la raza...”, diciendo a continuación que “los descendientes de este gran semental del Sur...dominan totalmente los concursos...”
Augusto Bedoya, propietario de la Hacienda Sierra Morena, ha sido muy hospitalario para con los criadores norteamericanos visitantes. En la Gira de Criadores de 1977 organizada por la AAOBPPH, el Sr. Bedoya fue el anfitrión de una sabrosa parrillada en su casa con aire de fortaleza y desde la cual se aprecia un impresionante panorama del bello valle de Cieneguilla. José “Pepe” Musante, Jr., es el que administra Sierra Morena para el Sr. Bedoya y su familia.
El Sr. Edgar Eyzaguirre, propietario de la Hacienda La Colina, es otro gran aficionado de los Caballos Peruanos. Su criadero queda cerca al del Sr. Mazzi. Uno de los socios fundadores de Los Pumas, el Sr. Eyzaguirre es un hombre jovial, popular y respetado por todos los que se asocian con él.
Andrés Ugarte, uno de los criadores “novatos” de la zona, generosamente abrió las puertas a la Gira de Criadores, AAOBPPH donde el amplio césped verde forma un marco apropiado para que dentro del mismo algunos de los mejores ejemplares de la zona fueran presentados a manera de pequeño concurso.
Otro criador es Luis “Lucho” Velez, ejecutivo de Chrysler de Perú. Caballos en los Estados Unidos de su criadero son *Soberana de Prestigio y *Ardilla, las cuales originalmente compró a Aníbal Vázquez, y que son dos de los contados caballos criados por Vasquez, en los Estados Unidos.
Luis Ortiz de Zevallos es también digno de mención en cualquier conversación entre los aficionados del Caballo Peruano de Cieneguilla. El es quien otrora fuera propietario de Regidor, uno de los únicos caballos descendido de dos Laureados, Carmelo y Copelia.
Los Pumas está formado por un grupo de criadores y amigos de la localidad, y se inició con sólo ocho socios (Hugo Casas, Eduardo Escandón, Edgar Eyzaguirre, Manuel Mazzi, Clemente Palma, Andrés Ugarte, Luis Velez y Rafael Vidal). Fue el resultado de interminables conversaciones sobre las realidades y posibilidades del Caballo peruano. Aveces las conversaciones se prolongaban hasta altas horas de la noche y, por supuesto, nunca faltaron el pisco y la música tradicionales. Don Manuel Mazzi recuerda con nostalgia que Hilario Carrera, conocido chalán, amenizó muchas de estas reuniones con su melodiosa guitarra y canciones criollas. Este unido grupo de aficionados se ayudaba mutuamente para soportar entre sí las dificultades que les acarreaba la Reforma Agraria
En 1972 se realizó el primer Concurso Campeonato Regional en Cieneguilla, con la participación de sólo 35 caballos. Los jueces fueron Jorge Juan Pinillos, Aníbal Vásquez y José Risso. Seguidamente tuvieron lugar los concursos anuales, reuniendo cada vez más expositores y ejemplares. Como se mencionara antes, el año pasado se presentaron más de 112 caballos. Otros jueces han sido Carlos Gonzáles, Luis Huguet y Luis de Ascásubi. El Sr. Ascásubi, autor de la obra “El Caballo de Paso y su Equitación”, y una autoridad sobre los Caballos Peruanos, viajó desde el mismo Ecuador para arbitrar en Cieneguilla. Según el Sr. Mazzi, éste ha sido el único concurso en el Perú en el cual se ha desempeñado como juez.
Los socios de Los Pumas se sienten muy orgullosos de lo que han logrado sus caballos en el Concurso Nacional del año pasado. Veintisiete caballos fueron presentados en dicho evento. Obtuvieron dos Campeones Nacionales y el 80% de sus caballos recibieron premios. Ellos sienten que han logrado mucho al estar haciendo realidad la meta original de los socios fundadores: la crianza de caballos en un proceso continuo de mejoramiento.
Quizá el aspecto que más destaca de los Pumas sea su participación en numerosos desfiles, paseos y otros eventos similares. Con frecuencia salen a caballo en paseos de un día para asistir a almuerzos y fiestas tradicionales en lugares como Santa Rosa de Chontay. La finalidad de estos paseos es, disfrutar de su mutua compañía bajo las mejores circunstancias posible - cabalgando sobre sus queridos caballos.
Cada año, en la víspera de la inauguración del Concurso Nacional, los criadores de Cieneguilla hacen un peregrinaje a caballo hasta el campo ferial de Mamacona. Es un viaje de 47 kilómetros, lo cual demuestra la resistencia que esperan de sus cabalgaduras. El semental Tinto, a sus veintiséis años de edad, creó toda una leyenda nueva al realizar este viaje, caminando luego en la “prueba funcional”, para terminar ganándose una Mención Honrosa en su categoría.
En 1978 fue muy emocionante para un grupo de norteamericanos que estaba de visita, manejar unos ocho kilómetros desde el campo ferial hasta el criadero de Alfonso Mendizabal, para conocer a los jinetes. Luego de esperar durante una hora, alguien gritó emocionado que estos se acercaban. Unos quince chalanes, sus ponchos flotando en el aire, se quitaron el sombreros y se detuvieron frente al pequeño comité de bienvenida. Siguieron unas copas de pisco, así como cálidos saludos para las visitas norteamericanas. Yo estuve sorprendido y complacido cuando uno de los chalanes me invitó a ir los últimos kilómetros restantes, montado en su caballo. Nos detuvimos cada tantos kilómetros mientras daba la rueda la botella de pisco y se hacían los brindis de rigor. Los jinetes eran un grupo alegre no solamente por el paseo sino además porque contamos con la presencia de una dama para la parte final del paseo. Cabalgando orgullosamente por un pequeño pueblo donde los habitantes se agolpaban en las puertas de sus pequeñas viviendas modestas y aplaudían mientras pasábamos. Finalmente nos acercamos a la larga avenida con sus arboles que conduce al campo ferial. Nos formamos nuevamente en grupo, tomamos un último y corto trago de pisco, e ingresamos a la avenida. Como había anochecido, se habían estacionado los automóviles formando un círculo, con los faros encendidos y dirigidos hacia el centro. Pareciera como si cientos de personas estuvieran allí para darnos la bienvenida mientras entramos a la brillante iluminación, a caballo, en medio de los músicos que tocaban “José Antonio” y entre los saludos del gentío emocionado. Sonaban las campanas y la gente cantaba. Fue una experiencia maravillosa.
Las actividades de Los Pumas han tenido como resultado el hacer que la zona de Cieneguilla sea conocida en todo el mundo de los criadores de Caballos Peruanos, promocionando mejores y más amplios programas de crianza entre sus socios, estimulando mayor representación en los Concursos Nacionales, desarrollando su propio concurso regional y, lo que podría ser lo más importante de todo, animando a sus socios y a todos los aficionados a divertirse y gozar montando sus Caballos Peruanos.
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