Translate

Saturday, February 7, 2015

Aparecen los ‘Urresti fans’ que llenan el vacío que dejó el ministro en Twitter y los Alanistas (Alan, Mulder y Quesquén) tiemblan


¡Sálvese quien pueda! En redes sociales han encontrado la inmejorable forma de seguir con el estilo del único ministro que ha puesto en ridículo a los políticos tradicionales
Por: Jack Hurtado
@JackHurtado
Cuando el ministro del Interior, Daniel Urresti, había encontrado en su cuenta de Twitter una espectacular trinchera para responder a Keiko Fujimori, a Alan García, a la prensa o “dioses del periodismo” y a la oposición que intentaba sacarlo del cargo, un ‘estate quieto’ desde la Presidencia del Consejo de Ministros lo dejó fuera de juego, al menos, por el momento.
La jefa del Gabinete, Ana Jara, solicitó que el Gobierno se “aboque a la agenda nacional", en ese sentido pidió al ministro que deje las discusiones por el Twitter. Urresti Elera tuvo que aceptar las “recomendaciones” y se limitó a retuitear (replicar mensajes) de su trabajo en diversas localidades del país.
Sin embargo, la no acostumbrada presencia del ministro en esta red social ocasionó que aparezcan hasta cuatro cuentas falsas. Unas más certera que la otra. Incluso, hasta intercambian comentarios con periodistas y otros personajes. La fama en el Twitter de Urresti está siendo aprovechada por diversos personajes para bombardear las redes y a los personajes más controvertidos de la política nacional, los ‘enemigos’ del verdadero Urresti. Algo así como una venganza de honor. En el nombre del padre.
Los Urresti-Fake
diario16 pudo detectar en una rápida búsqueda en Twitter hasta cuatro cuentas falsas que usan la identidad de Urresti Elera. No se sabe si detrás de ellos está una misma persona, o son perfiles aislados. Lo cierto es que dos de ellas están activas y muy pendientes de la coyuntura nacional.
El usuario @UrrestiFake describe claramente en el nombre de su cuenta que es falso, aun así utiliza la imagen del titular del Interior. Sigue a 21 personas y es seguido por 30. Lo peculiar de esta cuenta es que en los 90 tuits que escribió, es de los que más se asemeja a la personalidad en redes del ministro.
Por ejemplo, ante el último mensaje de Keiko Fujimori en el que pedía una cita con Humala por Twitter y no formalmente, el ‘UrrestiFake’ escribió: “Hay quienes tienen problemas de gobernabilidad en el matrimonio. En otros temas, creo que el que debe pedir una cita con Ollanta es Mark”, suscribió.
En otras oportunidades responde a Keiko Fujimori y también al APRA. “Soy un deslenguado, pero eso se cura. Lo de Alan, Quesquén, Mulder y Jorgito, ya es metástasis, les sugiero la Eutanasia @APRA_Oficial”, citó a la cuenta oficial del partido de la estrella. Hasta el cierre de esta edición, esta cuenta ha seguido tuiteando.
@UrrestiCandanga es otra de las cuentas falsas. Utiliza una caricatura de Daniel Urresti como foto de muestra. Tiene solo 19 seguidores, pero también es uno de los más activos con 43 mensajes. Es otro de los que se acerca al estilo de Urresti, pues es de las que más responde al resto de usuarios en el Twitter.
Existen otras dos cuentas, que si bien están inactivas hace mucho tiempo, usan la imagen del titular del Interior. El usuario @DUrresti inscribió su cuenta en Twitter en julio del 2012 cuando Urresti ni siquiera llegaba a ocupar un ministerio. Este usuario con solo 11 tuits tiene 205 seguidores, la mayoría de ellos son usuarios activos. Esta cuenta utiliza una fotografía del ministro y sigue a cuatro personas; entre ellas dos periodistas y a la primera dama Nadine Heredia.
El usuario @DanielUrresti sorprende más. Ha tuiteado una sola vez desde que creó su cuenta en febrero del 2012; y alcanzó los 121 seguidores, de los cuales casi la tercera parte son usuarios falsos. No tiene ninguna imagen como foto de perfil.
El polémico tuitero Urresti
Daniel Urresti con sus 59,388 seguidores en el Twitter no es precisamente el ministro del Interior más popular en esta red social en el continente, pero no hay dudas que es el más polémico. "Estimada Sra, que yo recuerde, el único presidente que tiró la toalla, renunció por fax", le escribió una vez a Keiko Fujimori recordándole a su padre Alberto Fujimori.
"Me permito sugerir un premio tipo 'gran discípulo montesinista' a la persona que coloca titulares en El Chuchimercio", dijo en alusión al diario El Comercio.
Tras dejar sus efusivos tuits, Daniel Urresti acusó que recibe una campaña de ofensas pese a que ya no contesta a sus opositores.
 "Cuando viene la ola de insultos, yo esperaba que me defiendan, que digan dónde está la altura del debate, que cómo es posible que se ataque al ministro, pero yo no veo nada”, señaló e incluso preguntó si existía algún "concurso de quién insulta más y mejor al ministro".
Las redes sociales son un tema a tener muy en cuenta. Si bien es fácil detectar la piratería en estos cuatro usuarios de Twitter, puede existir casos que otros perfiles o estos mismos adquieran más poder en las redes, y generen discrepancias o conflictos en el intercambio de mensajes. La popularidad social de Urresti ya despertó a varios usuarios. El ministro ya frenó su ritmo tuitero. Los usuarios falsos no lo harán.
En la vida real también
Fuera de las redes sociales también existen sujetos que de alguna manera quieren colgarse de la popularidad del ministro. Ayer, el Ministerio del Interior presentó a un presunto estafador que se hacía pasar como asesor de Daniel Urresti.
El noviembre del año pasado ya se había detenido a un hombre acusándolo de engañar incautos presentándose como asesor del ministro. La fama del ministro atrae hasta delincuentes. Mientras tanto el sigue informando sobre sus pasos en las diferentes regiones del país, donde destaca su particularidad de no hablar en conferencias de prensa ni sentado en una mesa sino que megáfono en mano habla directamente con la población. La gente se toma ‘selfies’ con él, parece un candidato en campaña aunque él jura que no tiene esas expectativas. Ese es su estilo, caminar y hablar, contestar (y vaya que lo hace bien), tan bien como para dejar mudos a los políticos más ‘cancheros’ del país
.

No comments:

Post a Comment